jueves, 31 de mayo de 2012

El viento quiere mi sombrero azul

No me gusta el viento cuando sin decirme nada parece que está enfadado y me grita
No me gusta cuando mueve las cosas a sus anchas y las trae y las lleva depositándolas donde le parece, sin preguntarles dónde quieren estar (si alguna vez soplara muy fuerte, pienso, haría lo mismo conmigo)
No me gusta cuando dobla los áboles y las flores y la hierba... haciéndoles inclinarse a su paso

Y no me gusta nada de nada cuando intenta robarme mi precioso sombrero azul




jueves, 24 de mayo de 2012

Perdida en una gran ciudad desconocida descubriendo lo que es perderse

Perderse en una gran ciudad desconocida no es perderse

perderse es no saber dónde buscar
perderse es no saber quien eres, cómo eres
perderse es no saber saber a dónde va el camino que has elegido
perderse es no saber lo que te gusta y lo que no, lo que quieres y lo que no
perderse es no ver la sonrisa o las lágrimas del que está a tu lado
perderse es no darse cuenta de lo bien que huele ese café recién hecho que te acaban de servir
perderse es no agradecer el poder darte una ducha cuando te apetece, tener ropa limpia, medicinas, cosas buenas para comer y beber.....
perderse es no darse cuenta de que salió el sol y te calienta la cara después de diez días grises lloviendo
perderse es no darse cuenta de que suena esa música tan bonita
.................

Perderse es el paso para la alegría enorme al encontrarse de nuevo
Por eso, perderse durante un tiempo (sin quedarse perdido para siempre), es algo muy bueno  




domingo, 6 de mayo de 2012

SOLO HA SIDO UNA PESADILLA

 La oscuridad me da mucho miedo. No la oscuridad azul o la oscuridad amarilla o la verde... no.


 
 
 La oscuridad que me asusta es la oscuridad negra, esa que me visita algunas noches trayendo consigo un montón de bestias monstruosas de ojos rojos, con bocas llenas de dientes, con lenguas de serpiente, vomitando criaturas horribles... Esa oscuridad que se hace boca o agujero con el que poder engullirme para robarme la risa, la alegría, las ganas de conocer, las ganas de mirar y descubrir... Entonces me tapo los ojos con las manos muy fuerte e intento que la oscuridad negra se marche (sino la miro y no la hago caso al final me deja en paz) Poco a poco va volviendo el color y cuando mis ojos cerrados empiezan a ver rojo, azul, verde... puedo apartar las manos y volver a mirar. Entonces la oscuridad negra y todas sus bestias se han marchado... 

SOLO HA SIDO UNA PESADILLA