A veces el sol se despide despacito, sin hacer ruido... y no me doy cuenta. En cambio algunos días organiza un tremendo espectáculo en el cielo encendiendolo y tiñendo todo de rojo como si quisiera que me parara a mirarlo...
Cada persona a la que quiero ocupa un trocito de mi corazón. Una risa compartida, una excursión, una conversación, un abrazo, una caricia, una lágrima, una bronca, un sueño, una carrera para llegar a tiempo, una gripe, un suspiro, un silencio, una mirada, un correo, un paseo... Cada rato vivido con alguien querido es un trocito de mi corazón. Por eso mi corazón no para de contarme historias y de dibujarme momentos que quiero compartir para que asi puedan formar parte de otros corazones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario